Principales plantaciones del árbol del pistacho en la provincia de Sevilla
Principales plantaciones del árbol del pistacho en la provincia de Sevilla. El árbol del Pistacho, fue plantado por primera vez en Asia occidental. Su cultivo se extendió al mundo mediterráneo pasando por Irán Central. Lugar donde ha sido durante años, el mayor productor de este fruto. Según algunos manuscritos, en la época romana, en la Península Ibérica ya se consumían los pistachos. Pero ha sido más en la actualidad cuando se ha comenzado a extender su cultivo en la provincia de Sevilla. Puesto que las condiciones meteorológicas son propicias para su cultivo.
Plantaciones del árbol del pistacho
Se trata de un árbol que aguanta muy bien las condiciones climatológicas de Sevilla. Además pueden soportar una oscilación de temperatura que va desde los menos diez hasta los cuarenta grados. Donde no se desarrollan bien es en suelos muy húmedos. Ya que sus raíces corren el riesgo de pudrirse.
En el caso de la provincia de Sevilla, la zona por la que se ha comenzado este cultivo es la Campiña. Más concretamente, Carmona. Que tradicionalmente ha sido zona de plantación de trigo y girasol. Pero que ahora se encuentra una nueva vía de negocio con este fruto. Hay una extensión para cultivar 164 hectáreas en la localidad. Donde ha plantado 47.000 árboles. Estos producirán más de 160.000 kilos de pistacho de aquí a diez años. Cuando el cultivo esté a pleno rendimiento, aunque los primeros pistachos los recogerán en septiembre. Dentro de cinco años.
Arbol del Pistacho
Las principales razones por las que han escogido Carmona son dos. Primero por las condiciones del suelo del municipio –así como del resto de la Vega del Guadalquivir. Y segundo por el clima, frío en invierno y caluroso en verano. Dos condicionantes que son «favorables» para este cultivo. En concreto, producirán pistacho Avdat, procedente de Israel. Que es muy apreciado a nivel mundial por su calibre. Esta variedad de forma alargada es de un color verde intenso y de sabor dulce.
La rentabilidad de este cultivo no es inmediata. Para poder recoger los primeros frutos, también económicamente hablando, deben pasar al menos cinco años. Aunque el árbol no estará a pleno rendimiento hasta pasada una década. Sin embargo, el pistachero es un árbol longevo. Pues su etapa de rentabilidad se alarga entre 50 y 60 años, aunque puede vivir tanto como un olivo.